Hay momentos especiales en la vida... y personas que los hacen aun más especiales. Yo estoy en un momento maravilloso de mi vida: tengo un trabajo que me gusta, una familia que adoro y que tengo la suerte de ver que es recíproco; también estoy muy orgullosa de formar parte de un grupo de teatro que me ha puesto las alas que me habían cortado, pero el mayor motivo de mi creciente felicidad es: que gracias a este sueño Miss Sugar hecho realidad he podido conocer a personas tan maravillosas como Marián... la responsable de este encargo y madre de Edu, Edu: una adorable y entrañable personita que sólo con ver la cara de felicidad que puso al enseñarle la tarta ya compensa todo el esfuerzo.
Y Marián (profesional peluquera muy querida por todo el mundo) es la alumna más aventajada de mis talleres, hasta el punto que ya los ha hecho todos!!!! Sí: todos. Y en público quería darle las gracias por su apoyo, sus múltiples halagos, y sus maravillosas palabras de agradecimiento, pues Marián ha sido una de esas personas que se ha contagiado de la alegría de endulzar la vida…
También darle las gracias a su madre por los emotivos agradecimientos al ver a su hija más feliz desde que ha acudido a nuestros talleres y poder transmitir esa felicidad a los suyos a través de la repostería creativa. No os imagináis cuánto me habéis marcado en tan poco tiempo. Ha sido, es y será un placer compartir más momentos “reposteros” contigo…
Bueno, vale, que no os empalago más... os dejo con la tarta que Marián encargó con muchísima ilusión para sorprender a su hijo Edu al que le encantan las motos, y al que también agasajó con un montón de cupcakes preciosos hechos por ella, y un montón de cosas más para darle el cumpleaños más especial del mundo, porque Edu no se merece menos.
La tarta es de cuatro capas de mantecado de vainilla con almíbar de vainilla rellenas de Butterswiss de Nutella.
Y aquí está la tarta lista para la entrega y para alegrar la vida de personas tan maravillosas a las que sólo puedo dar las GRACIAS CON MAYÚSCULAS y luces de neón. MILLONES DE TONELADAS DE BESOS
La mejor recompensa por una trabajo hecho con cariño y esfuerzo, no es solo que te feliciten, es saber que has podido hacer un poco más feliz a una persona, y este ha sido el caso. La tarta es maravillosa y seguro que estaba muy buena, pero lo mejor de todo y lo más especial era la persona a la que iba destinada,que se merece todo esto y mucho más. ¡GRACIAS MISS SUGAR POR HACER FELICES A OTRAS PERSONAS CON TU TRABAJO!
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